Falleció la noche del viernes en circunstancias muy adversas para su familia. Gracias a un estudio sobre el fotógrafo pictoralista Martín Ortiz abandonó la curaduría de artes plásticas por la investigación gráfica. En 1990 debutó con sus notas semanales "Clicks a la distancia" en El Financiero, donde fue implacable menos con sus fotografas/os o con él mismo. Dos o tres veces le envié información de mi archivo que bajo su magia aparecía como si él las hubiera investigado (De Mauleón me hizo lo mismo).
Fundó y dirigió la revista institucional Alquimia (INAH, 1998-2018), especializada en fotografía en México anterior a 1950. En esta revista colaboré en diversos números. En 2005 le permitieron publicar un número dedicado a la pornografía tricolor pero ya no el número de Chinas y Charros, sobre lesbianismo y homosexualismo. Siempre me molestaba con José Antonio porque no aparecían mis créditos fotográficos. Cuando iban a aparecer mis iniciales MAM se convirtieron en "Museo de Arte Moderno", descuido que atribuyó a Brenda Ledezma. Me dijo que habría una fe de erratas la cual jamás apareció. Utilizaba mis fuentes para después lucirme sus "hallazgos". Desde hacía mucho tiempo había dejado de hacer investigaciones sobre fotografía. Aprovechó su fama para curar exposiciones complacientes o para entregar textos retóricos muy a su cansino estilo. Así lo demuestran sus colaboraciones irregulares para el suplemento de El Universal y su "investigación" sobre Smarth, un compendio de sus lugares más comunes.
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